En el mundo de la botánica existen los enigmas. Hay especies de plantas con cualidades peculiares que rompen las normas establecidas por la mayoría de sus hermanas. Cuestiones como el momento de floración, el crecimiento de la planta, la propagación o reproducción son inconsistentes en algunas matas. Es por esta razón, que los amantes de flores extravagantes siempre andan en busca de estos especímenes para su colección.
Las matas de Kalanchoe son una de estas, los científicos están atónitos al observar sus peculiares características. La planta florece cuando ella desea; es más, hay plantas que nunca lo hacen o lo hacen solo una vez. En contraposición, existen otros que lo hacen varias veces al año. El factor de la fortuna será la única que jugará a la hora de elegir que tus flores lo hagan o no.
Su crecimiento también es un misterio, se han estudiado plantas que crecen hasta los 3 metros. Pero también se han catalogado especies que no crecen más allá de los 30 centímetros, es por ello que deberás tomar previsiones en cuanto a al lugar en dónde los plantarás para anticiparte a sus cambios inesperados de desarrollo. Para prevenir este y otros aspectos, sigue leyendo para descubrir cómo plantarlas apropiadamente.
Plantación de Kalanchoes
Aunque no podamos controlar su crecimiento apropiadamente, debemos otorgarles todas las condiciones necesarias para nuestros Kalanchoes crezcan lo más sano posible, considera lo siguiente.
- Sol: Puedes plantar tus matas tanto dentro como fuera de tu hogar. Pero, sin importar cuál de estos lugares elijas, deben recibir al menos 4 horas de luz solar diarias. De esta manera, nos aseguraremos de que reciba la vitamina D requerida para que, con un poco de suerte, nos florezcan debidamente.
- Terreno: Lo mejor es que el suelo en el que pienses plantarlos sea suelto. De no ser así, puedes arar la tierra y combinarla con una bolsa de abono para otorgarle un extra en cuanto a vitaminas.
- Drenaje: Como casi con cualquier otra planta, debemos asegurarnos que la zona cuenta con su respectivo drenaje. Si no es así, evita este lugar y busca, en cambio, aquellos en donde el agua drene correctamente.
- Espacio: Para prevenir alguna que otra sorpresa, debemos disponer de una zona que cuente con el espacio adecuado para que, de ser requerido, la planta se desarrolle con toda libertad. Este es uno de los factores más importantes a tomar en cuenta a la hora de proceder a sembrarlo.
- Clima: Durante sus primeros meses, son sensibles a cambios bruscos de temperaturas y ventiscas. Por esta razón, debemos cubrirlos en los costados con láminas para protegerlos. Estas las podemos retirar una vez pasen los 4 meses de haberlas plantado.
Tomado nota de lo anterior, procedamos a plantarlo, sigue estos sencillos pasos para lograr que nuestras plantas prosperen:
Paso 1
Primero que nada, debes adquirir tu ejemplar. Puedes hacerlo mediante a pequeños hijuelos que se desprenden de sus tallos o las escasas semillas que dan sus flores. Como los hijuelos son más comunes, probemos en primera estancia estos. Puedes intentar sembrar desde los más pequeños hasta los que están más desarrollados.
Paso 2
Luego de haber elegido el que más nos guste, debemos cavar agujeros de unos 10 centímetros de profundidad. No te recomendamos que, si deseas plantar más de uno, lo hagas a una distancia menor de 15 centímetros de distancia. Agrega un puñado de abono y cúbrelos presionando el terreno con las plantas de tus manos.
Paso 3
Por último, no resta más que regarlos abundantemente. Si lo deseas, para terminar el proceso de plantación, puedes proceder a regarlos con fertilizante natural. De esta manera habremos concluido con su cultivo. Es hora de conocer cómo otorgarles sus respectivos cuidados.
Cuidados de los Kalanchoes
- Riego: Lamentablemente no podremos decirte con qué frecuencia deberás regar a tu Kalanchoe. Empieza por hacerlo cada 2 días, si notas que le cae bien luego de dos semanas, prosigue haciéndolo así. Si no, varía el intervalo de días hasta que logres conseguir el que tu espécimen acepta mejor. Hay plantas que los aceptan hasta solo una vez al mes.
- Abonado: Con el abonado es diferente. Debes hacerlo 3 veces por año eligiendo las bolsas de abono que cuente con componentes ácidos elevados. De esta manera, nos estaremos asegurando de estimular su proceso de floración.
- Poda: De igual manera, para estimular su crecimiento debemos podarlos 2 vece por año. Si no crece de manera acelerada solo debemos hacerlo una vez.
- Cuidados de las flores: Si has tenido la suerte de que haya florecido, debes cuidar sus flores para estas duren más: Primero que nada, no debes regarlas con agua, esto es perjudicial para estas flores. Rocíalas con unas cuantas gotas de fertilizante natural para camuflar su aroma ante los insectos. De igual manera, una vez que se hayan secado debes retirarlas manualmente.
Control de plagas y enfermedades
Si la fortuna juega en contra tuya, es posible que algunos insectos acudan a la planta para devorar su flor. Solo hay 2 insectos que acostumbran hacerlo, estos son:
- Orugas: Son glotonas por naturaleza, no distinguen entre una u otra planta. Devorará tus flores en menos de un día por lo que deberás estar vigilándolos constantemente a él y a todo tu jardín. Te recomendamos que, si llegas a divisar uno, no lo mates; solo apártalo colocándote un guante retíralo a una zona bien apartada de tus plantas.
- Arañas rojas: Las arañas no engullen nuestras flores, sino que acostumbran a anidar allí. Esto ocasiona que la flor se marchite antes de tiempo cuando el insecto comience a desovar otras arañas. Tendrás que utilizar insecticida y ser muy perseverante para eliminarlas por completo.
Consejos y recomendaciones finales
No está de más que te demos unos cuantos consejos que te resultaran muy útiles una vez que tus plantas hayan pegado, algunos de estos son:
- Para sacarle hijuelos al Kalanchoe deberás esperar hasta el segundo año de haberlos plantado. Aunque siempre puedes probar con los que se desprenden de sus tallos; cuando estos caen le salen raíces en un par de días.
- Puedes plantarlas en cualquier época de año, ya sea que elijas el invierno o la primavera se terminará adaptando a estas estaciones.
- Sin embrago, si deseas trasplantar un espécimen ya constituido, deberás esperar y hacerlo solo en la primavera.