Cómo y cuándo plantar Romero

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Por Isabel Garrido

El Romero es un arbusto de hoja perenne con asombrosas flores azules. Es una planta picante y distintiva con un sabor dulce y resinoso. Resulta ideal para un jardín de rocas o en la parte superior de una pared seca. Sigue leyendo y aprende todo lo que necesitas saber para disfrutarla en casa.

Esta hierba aromática es indispensable para la cocina, se utiliza como elemento decorativo en el jardín, y en la aromaterapia. Es un miembro de la familia de la menta, crece como un arbusto perenne en muchos climas y prospera con facilidad en contenedores. No hay excusas para no hacer crecer algunos en casa.

Independientemente de la zona de crecimiento, el Romero es una necesidad para los jardines. En las zonas más cálidas, esta hierba es la candidata perfecta para la jardinería de contenedores, siempre y cuando reciba la luz necesaria y el suelo se encuentre bien drenado.

Es de bajo mantenimiento, y en la mayoría de los casos se encuentra libre de plagas. Su única preocupación podría ser el moho pulverulento, que se puede evitar no sobre regando, proporcionando un espacio adecuado, así como una buena circulación de aire entre sus plantas vecinas.

Aunque puede alcanzar una dimensión considerable, es de crecimiento lento durante su primer año de establecimiento. Puede llegar a crecer entre un metro o dos metros de altura, depende del lugar donde se esté sembrando.

Como se mezcla bien con otras hierbas, úsalo ligeramente en los platos de comida con proteína animal, sopas, guisos y verduras. Para nadie es un secreto, que el sabor del Romero y sus cualidades aromáticas lo hacen la compañía perfecta en salsas y baños para relajar el cuerpo.

Plantación del Romero

Es recomendable sembrar esta hierba perenne en las zonas más cálidas, dentro del paisaje como un arbusto o donde se encuentren una gran variedad de plantas como en un jardín de rocas. Si por el contrario, vives en una zona más fría puedes hacerlo de igual manera en el jardín, pero cuando lleguen los vientos fríos prepárate para llevarlo dentro de tu hogar.

El cultivo de Romero a partir de semilla generalmente produce una baja germinación y una excesiva variación de su especie más común. Es fácil de propagar, incluso las raíces se desarrollan mejor en un vaso de agua en una ventana soleada.

Para sembrar hazlo preferiblemente en un contenedor. Toma los cortes de la siembra de un amigo y haz el proceso de la siguiente manera:

  • Procura hacer un corte de 7cm desde la punta de un tallo
  • Retira las hojas a 2cm de la base
  • Aplica una hormona de enraizamiento en la parte expuesta del tallo
  • Consigue una maceta o contenedor que posea un buen sistema de drenaje.
  • Utiliza un suelo bien drenado que esté entre un pH de 6 y 7.
  • Siémbralo en una mezcla de raíces que incluya musgo.
  • Asegúrate que sus necesidades de luz se cumplan

De esta forma, las raíces comenzaran a surgir dentro de 3 a 4 semanas. Para ganar tiempo de ventaja si vives en una zona cálida, siembra las semillas o plántulas antes de la última época de frío en tu localidad.

Cuidados de la planta

Cultivarlo dentro del hogar a veces puede ser un procedimiento difícil. Muchos buenos jardineros han intentado, y a pesar de sus mejores esfuerzos, terminan con una planta de Romero, seca, marrón y muerta.

Por lo tanto, para evitar que esto te suceda procura tomar en cuenta los cuidados generales que compartimos contigo a continuación:

  • Vigila con frecuencia el suelo de la planta que no esté demasiado seco ni muy húmedo para evitar que se pudra la raíz.
  • Deben llevar de 6 a 8 horas de luz fuerte y directa. Mientras que 4 o 6 horas de luz débil o indirecta también le favorecen.
  • Poda regularmente para que no se pierda muy rápido.
  • Riégalas uniformemente a lo largo de su temporada de crecimiento.
  • Asegúrate de dividirla para la próxima temporada.
  • Utiliza fertilizante de liberación prolongada durante la siembra y vuelve a aplicar en la primavera.

Plagas o enfermedades

Cuando se establece al aire libre, los insectos por lo general no son un problema. Sin embargo, en casa suelen ser más propensos a causar problemas. La mayoría de las veces existen cuatro factores que matan las plantas de Romero, estas son:

  • Falta de luz solar: si no recibe al menos de 6 a 8 horas de luz al día, coloca una lámpara con una bombilla fluorescente lo más cerca posible para complementar la luz solar.
  • Malas prácticas de riego: una de las razones más comunes de su muerte. Procura sólo regar el suelo cuando la parte superior esté completamente seco al tacto.
  • Plagas: las moscas blancas, ácaros de la araña y las cochinillas pueden molestarlos con frecuencia. Puedes utilizar aceite de neem, es totalmente eficaz contra las plagas, así como inofensivo para los seres humanos y mascotas. De igual manera también puedes rociarlo con un jabón insecticida hasta que vuelva a estar sana.
  • Moho pulverulento: para controlar esta situación aumenta la circulación de aire alrededor de él. Ubícala en un lugar más abierto, también puedes utilizar un ventilador pequeño durante 3 o 4 horas al día.

Consejos y recomendaciones

Si sabes todos los secretos para el cuidado apropiado de esta hierba cuando crecen adentro, podrás aprovecharla durante todo el año. Si eres un jardinero aficionado o todo un experto, toma nota de  los mejores consejos y recomendaciones generales que a continuación compartimos contigo para obtener un desarrollo óptimo.

  • La mejor manera de cultivar Romero en una zona más fría es mantenerlo en un recipiente móvil. De esta manera podrás disfrutar de esta hierba aromática durante todo el año.
  • Evita la compra de los pequeños brotes. Obtén una ventaja y paga por un brote más grande.
  • Asegúrate que el drenaje en el recipiente sea excelente.
  • Regar demasiado y con frecuencia causará la podredumbre de la raíz.
  • Agregar fertilizante al suelo durante la primavera ayudará a su crecimiento.
  • En el jardín, siembra cerca de frijoles, repollo, zanahorias y salvia.
  • Recuerda dejar entre cada planta un espacio de por lo menos un metro de separación